Extrayendo los fuentes, corrigiendo el núcleo (si es necesario)

Los fuentes del núcleo deberían ponerse en /usr/src. Por lo tanto, debería ir a este directorio y luego extraer los fuentes allí:

$ cd /usr/src
$ mv linux linux.old
$ tar xjf /ruta/a/linux-2.6.1.tar.bz2

El comando mv linux linux.old es necesario: esto se debe a que Usted ya podría tener los fuentes de otra versión del núcleo. Este comando le asegurará que no escribirá sobre los mismos. Una vez que el archivo se descompactó, tiene un directorio linux-<versión> (dónde <versión> es la versión del núcleo) con los fuentes del núcleo nuevo. Puede hacer un vínculo (ln -s linux-<versión> linux) para su comodidad.

Ahora, los parches. Asumiremos que quiere patchear (o corregir) de la versión 2.6.1 a la 2.6.3 y que ha descargado los parches necesarios para hacer esto: debe dirigirse al directorio linux creado recientemente, luego aplique los parches:

$ cd linux
$ bzcat /ruta/al/patch-2.6.2.bz2 | patch -p1
$ bzcat /ruta/al/patch-2.6.3.bz2 | patch -p1
$ cd ..

En general, para pasar de una versión 2.6.x a una versión 2.6.y es necesario que Usted aplique todos los patches numerados 2.6.x+1, 2.6.x+2, ..., 2.6.y en orden. Para “revertir” desde 2.6.y hasta 2.6.x, repita exactamente el mismo proceso pero aplicando los patches en orden inverso con la opción -R desde patch (R significa Revertir). Entonces, para regresar del núcleo 2.6.3 al núcleo 2.6.1, Usted haría lo siguiente:

$ bzcat /ruta/al/patch-2.6.3.bz2 | patch -p1 -R
$ bzcat /ruta/al/patch-2.6.2.bz2 | patch -p1 -R
[Tip]Sugerencia

Si desea probar si un parche se aplicará adecuadamente antes de aplicarlo realmente, agregue la opción --dry-run al comando patch.

Luego, en pos de la claridad (y para que Usted sepa donde está), puede cambiarle el nombre a linux para reflejar la versión del núcleo y crear un vínculo simbólico:

$ mv linux linux-2.6.3
$ ln -s linux-2.6.3 linux

Ahora es tiempo de pasar a la configuración. Para esto debe estar en el directorio fuente:

$ cd linux